El Servicio de Ginecologia y Obstetricia de la Fundación Hospital del Espíritu Santo ha instauradao desde hace unos meses una iniciativa que permite a las mujeres estar acompañadas durante la cesárea por una persona de su elección.
Este nuevo servicio es una iniciativa conjunta entre obstetras y comadronas, con el apoyo del Servicio de Anestesiología. De momento, y desde el pasado mes de mayo, ya se han realizado 40 cesáreas con acompañante.
Este protocolo estable los criterios clínicos, en los cuales es posible este acompañamiento y el procedimiento que tiene que seguir el acompañante en el interior del quirófano. En concreto, el acompañante por parte del padre, madre o familiar se puede llevar a cabo siempre que la cesárea sea programada y no urgente. Durante el preoperatorio, pero, la madre permanece sola un tiempo corto, en el que se aprovecha para preparar y cambiar también a la persona acompañante.
Reducir la ansiedad y mejorar el establecimiento y mantenimiento de la lactancia materna son algunos de los beneficios que puede tener la mujer al recibir este acompañamiento, los mismos que se disfrutan en un parto vaginal. Los beneficios para el recién nacido vienen dados, no tanto por la presencia del acompañante, sino por el contacto piel con piel con la madre todo el rato. Esto permite tener más estabilidad cardio pulmonar, gozar de una adaptación más fisiológica y reducir el estrés y el llanto.
El acompañamiento durante las cesáreas es un paso más hacia la humanización del proceso de nacimiento, uno de los proyectos transversales y que hace meses se ha implementado en la FHES. Esta iniciativa pretende que tanto la madre como el bebé sean tratados con la máxima empatía y respecto durante el proceso de cesárea y que la experiencia del parto sea la más natural y satisfactoria.